Consiste en un apagón eléctrico voluntario, se pide a personas y empresas que apaguen luces y aparatos eléctricos durante una hora.
La Hora del Planeta es una iniciativa a nivel mundial mediante el cual pretende concienciar sobre la necesidad de tomar medidas urgentes contra el cambio climático producido por la actividad humana.
Consiste en un apagón eléctrico voluntario, en el que se pide a personas y empresas que apaguen luces y aparatos eléctricos no indispensables durante una hora, desde las 20:30 hasta las 21:30 h. Con ello se promueve el ahorro de energía, la disminución de las emisiones contaminantes y la reducción de la contaminación lumínica.
La Hora del Planeta fue impulsada en el año 2007 por el World Wide Fund for Nature (WWF) y la agencia publicitaria Leo Burnett, con la finalidad de llamar la atención a nivel internacional acerca de los efectos adversos e impacto del cambio climático. Es un movimiento mundial que hace un llamado para cuidar la salud de nuestro planeta y de sus habitantes.
La primera Hora del Planeta se celebró en Sidney (Australia) el 31 de marzo de 2007, entre las 19:30 y las 20:30 horas. Se apagaron las luces de monumentos y edificios durante una hora, como gesto simbólico en rechazo a la problemática del cambio climático. También San Francisco se unió con la acción denominada Lights Out. Lo que empezó en Sidney se ha convertido en un movimiento global, que ha llegado a miles de ciudades de 188 países y territorios.
Actualmente el movimiento La Hora del Planeta promueve acciones directas para contrarrestar el impacto del cambio climático, así como la adopción de estilos de vida sostenible que tengan en cuenta la conservación de los bosques, los mares y los recursos naturales.
Los promotores de La Hora del Planeta aseguran que el cambio climático ya es un hecho contrastado y que debido a ello las consecuencias, si no se hace algo, pueden llegar a ser devastadoras. El simple hecho de apagar las luces durante una hora no evitará ninguna consecuencia climática, pero si busca crear conciencia en las personas para que sus actos sean más responsables con el medio ambiente.
Mostramos algunas recomendaciones y consejos prácticos para el ahorro de energía:
- Utiliza la luz natural en la medida de lo posible.
- Apaga las luces que no estés utilizando, al salir de un espacio o habitación.
- Desconecta los aparatos eléctricos y apaga los multiconectores que no estés utilizando.
- Utiliza el microondas en sustitución de estufas o cocinas eléctricas.
- Selecciona la opción de lavado en la lavadora, acorde con la cantidad de ropa.
- Elige el servicio de tintorerías «verdes» o ecológicas. Estas no utilizan solventes de percloroetileno, un solvente perjudicial para la salud humana y el medio ambiente.
- Los modelos de refrigeradores de eficiencia energética contribuyen al ahorro de energía.