Desde meses pasados ha existido una recesión económica a nivel mundial, a pesar de ello, en México el peso continúa a la baja, ya sea por la mala administración o por la corrupción que inunda al país.
El investigador del Colegio de México, Julio Boltvinik, sostiene que en lo que va de la presente administración federal aumentó el número de personas en pobreza y disminuyó la clase media en México. De acuerdo con su estudio “Evolución de la pobreza y estratificación social en México 2012-2014”, el total de población en pobreza pasó de 83.08 a 84.30%, mientras que la clase media bajó de 8.14 a 6.78%. En el país se rompió la marca de 100 millones de pobres. “Es una vergüenza”, señaló.
El estudio, que se basa en los resultados de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos en los Hogares del Inegi, precisa que al final del gobierno de Felipe Calderón había 97.4 millones de pobres, y en dos años de la gestión de Enrique Peña Nieto llegamos y rebasamos los 100 millones. También destaca que “tenemos pobreza de ingreso porque tenemos 16 por ciento de desempleo y un deterioro brutal del poder adquisitivo del salario mínimo. Hay mucho desempleo, y los que están empleados han visto cómo sus salarios se van reduciendo”, explicó Boltvinik.
Federico Bonaglia, asesor principal del director de Desarrollo de la OCDE, advierte que el crecimiento de la economía nacional se ha visto limitado por la subexplotación del potencial de desarrollo de todas las regiones del país y, en particular, por la falta de transformación estructural y despegue de la productividad. Instó al gobierno mexicano a invertir más recursos en la reducción de la pobreza y el crecimiento de la productividad, así como en políticas urbanas y territoriales. También indicó que no basta el crecimiento, es necesario también una adecuada redistribución para evitar que las brechas sociales sigan aumentado.
2016, MÁS DIFÍCIL.
El próximo año, la economía de México enfrentará más retos externos derivados de la crisis griega, los mercados bursátiles en China, la normalización de la política monetaria de Estados Unidos, la desaceleración económica global y hasta el acuerdo nuclear entre EU e Irán, que impulsará la oferta mundial de hidrocarburos y presionará a la baja los precios del petróleo. El adverso escenario incluye menores ingresos por el desplome del petróleo, mayor deuda y un creciente déficit presupuestal.
Por lo anterior, es indispensable que el paquete económico de 2016, que se entregará a más tardar el próximo 8 de septiembre, debe ser una fuente de solidez para tener finanzas públicas sostenibles en el tiempo. Sin embargo, de acuerdo con expertos, la Secretaría de Hacienda no tiene una metodología para elaborar un presupuesto base cero en 2016 que rompa con la inercia del gasto ineficiente de años anteriores. Advierten que sólo justificará un recorte “de machetazo” para enfrentar la disminución de los ingresos petroleros.