Esta pequeña de tan sólo 3 años de edad realiza pinturas abstractas e impresionistas que ya ha comenzado a vender por miles de dólares.
Iris Grace Halmshaw es una niña inglesa que fue diagnosticada con autismo, ya que no puede hablar, apenas pronuncia una palabra, es una niña distraída y nerviosa y lo único que la tranquiliza es pintar, pero con un pincel hace maravillas, por lo que hace que su obra sea más extraordinaria. Ahora, un coleccionista privado compró dos de sus originales trabajos por $1,800 euros cada uno. Previo a estas dos ventas sus cuadros habían sido vendidos por un precio menor de $400 euros.
Debido a su condición era de suma importancia que Iris Grace encontrara alguna actividad que le apasionara, encontró en la pintura una manera de expresión. Su madre relata como fue “por accidente» que Iris descubriera su pasión por la pintura.
«Por accidente, un día yo pintaba un hombre delgado e Iris encontró en ello algo muy divertido, mi madre cogió una base con colores y la comenzó a pintar fuera. Iris hizo un trazo y comenzó a pintar debajo de la página. Se puso furiosa y comenzó a llorar. No pensé que fuese un problema, ella no quería la pintura, no podía controlarlo. Puse un papel en una mesa e instantáneamente se puso a pintar».
Desde que los médicos le diagnosticaron autismo en 2011, Arabella (su madre) probó todo tipo de terapias con su hija. Iris pareció responder a la pintura y los progresos no solo se reflejaron en su condición, sino también en los dibujos que hacía.
«Podríamos haber vendido cada uno de sus cuadros diez veces, pero decidimos poner a la venta solo algunos de los originales y quedarnos con el resto. También vendemos reproducciones para recaudar dinero para su terapia», señaló con orgullo la madre de la precoz pintora.
Algunos han llegado a comparar la técnica de Iris con la del impresionista francés Claude Monet. Sin embargo, sus padres evitan este tipo de tipo de comparaciones y defienden que Iris tiene un estilo propio.
«Veo como prueba técnicas diferentes a su manera… se siente libre y le gusta experimentar. Cada uno de sus cuadros es diferente», afirmó Carter-Johnson (Su Padre).
Los padres de Iris quieren aprovechar la repentina fama de su hija para ayudar a niños con el mismo «problema» que Iris. El dinero que los padres de Iris recaudan con sus obras lo destinan a pagar las terapias de la niña. Pese a la euforia del momento, la pareja no quiere que su hija se convierta en un mero producto y mantiene presentes las prioridades para este genio de la pintura. Ahora Iris Grace practica y experimenta con nuevas técnicas por aproximadamente 5 horas diarias. La pintura, una nueva forma que utiliza Iris Grace para comunicarse. Te dejamos el Facebook de Iris.