Las necesidades crecen, pero en ocasiones las opciones no, así que debemos ingeniárnoslas para llegar bien librados a fin de quincena.
Una manera de no estar tan justos en el ámbito económico es haciendo una despensa efectiva. Cuando recibes tu pago, ¿qué es lo primero que haces? ¿pagar deudas? ¿comprar cosas innecesarias? ¿darte algún lujo?
Una manera eficiente de usar tu quincena es tener una distribución de tus gastos, es decir, ser consciente de los gastos fijos que tienes, separar el dinero para cubrir esos pagos (pueden ser colegiaturas, servicios, pago de tarjetas, gastos de transporte, etc.) te permitirá tener un control del dinero que te sobra, y de esa cantidad destinar una parte, o casi todo, a la despensa.
¿Por qué a la despensa?
Si eres de las personas que comen fuera de la oficina o no acostumbran comer en casa, seguramente destinas una parte de tu dinero a estos gastos, sin embargo hay productos que son indispensables para el hogar. Comprar papel higiénico, jabón de trastes, detergente, productos de aseo personal, de limpieza y algunas cosas más siempre es necesario, pero siempre hay una manera de hacer rendir más tu dinero para hacer la despensa, por lo que te damos unos tips que te serán de utilidad.
1. Haz una lista. Llevar las compras necesarias en un papel o en tu celular puede ayudarte a evitar las compras impulsivas, y así podrás saber qué sí y qué no, además de darle prioridad a los productos.
2. Compara precios. En algunos establecimientos los precios pueden variar por algunos pesos, por lo que detectar en dónde puedes encontrar a precios más accesibles tus productos favoritos te será de mucha utilidad. Recuerda que de peso en peso se llena la alcancía.
3. Compara marcas. Muchas veces más caro no significa mejor, y no hay nada como encontrar la marca que se ajusta a tus necesidades, por lo que no tiene nada de malo experimentar con diferentes marcas, así sabrás qué productos sí y de cuáles huir; además, esto te puede dar cierta flexibilidad al momento de hacer las compras.
4. Compara los productos. A veces podemos ahorrar varios pesos si nos damos a la tarea de saber qué nos conviene más. Aquí es poder decidir de acuerdo a tus preferencias y necesidades.
5. Ten reservas. Si por alguna razón la quincena pasada lograste ahorrar un poquito más de dinero, podrías invertirlo en tu despensa. Adquirir productos que no caducan y que siempre son útiles es una gran idea, como los productos de aseo personal.
6. Aprovecha las ofertas. ¿Recuerdas el mes en el que hay rebajas en varios productos? Pues ese es el momento de armarte con una gran despensa. Eso sí, siempre revisa que las ofertas sean reales y no una estrategia comercial.
7. Compra en mayor cantidad. Cuando nuestro presupuesto es muy justo es un poco difícil optar por esta opción, pero a veces hacer el esfuerzo vale la pena. En algunos comercios, a mayor cantidad de productos, menor precio; hay que saber aprovechar estas ofertas ya que no son válido para todo.
8. Compra a granel. Sí, es lo opuesto al consejo de arriba, pero así como hay productos que conviene comprar en cantidad, hay otros que no; por ejemplo: los alimentos como la fruta, en estos casos es recomendable comprar las cantidades estrictamente necesarias y, probablemente, en el local más cercano a ti.
9. Lleva un control. De todo lo que compras. No desperdicies, sé moderado y cuida tus cosas, esto permitirá que algunos productos te rindan más, o sea, que no tengas que reemplazarlos muy pronto.
Fuente: Occ.com.mx