Una noche con sonidos electrónicos y hip hop, así inició el ciclo 7 de Circuito Indio en Texcoco.
El Circuito Indio sigue girando en Texcoco y para dar inicio al ciclo 7 se presentó Bicho Blanco y Tino el Pingüino en Doppler Bar.
Tino “el Pingüino” fue el estelar de la noche, quien con sus letras relajadas, alejadas de los problemas que se viven en los barrios, sin carga política y cero distintivo gangster hizo cantar al público. Cabe mencionar la humildad del rapero, pues previo a subir al escenario convivió con los asistentes, tomándose la foto del recuerdo y otorgando autógrafos.
Tino describe su hip hop como de clase media, ya que gracias a rimas que narran un estilo de vida más apegado a su realidad como problemas de amor, escuela, conseguir chicas; se ha ganado el respeto y el gusto por más fans.
Antes de la presentación de Tino el Pingüino, fue el turno de Bicho Blanco, un proyecto conformado por Bernardo Pérez y Ferdinand González de The Guadaloops, que conjunta un sonido más pop de bases electrónicas y tintes tropicales.
Bicho Blanco, con más reciente material “Malas Lenguas”, llevó al público a un estado de ensueño ya que sus canciones parecen mitos de la noche y sueños de borracheras. Un sonido refrescante, a través de cualidades que parecen opuestas, pero se complementan perfectamente, las distantes voces de Bernie que van muy a tono con las prosas melódicas de Ferni a manera de secuencias.
