Cambia de aires y festeja la Navidad en Acapulco, Los Cabos o Puebla y deja atrás la rutina.
Hoy te hablaremos de los mejores destinos mexicanos para pasar Navidad.
Oaxaca.
Oaxaca desprende un aire familiar. En este bello estado podrás encontrar playas y restaurantes que ofrecen cenas navideñas y hoteles en los que tú puedes hacer tu propia cena. En el Centro Histórico puedes caminar y conocer todo lo que tiene por ofrecer, es decir, comida callejera, eventos al aire libre y algún artista emergente, además de presenciar las tradicionales posadas comunitarias. También puedes visitar Monte Albán, que tiene una vista al Valle de Oaxaca, y pasar las fechas entre culturas diversas.
Guerrero.
Por lo general, los antros y restaurantes en Acapulco permanecen abiertos en la noche de Navidad, por lo que puedes celebrar en cualquier sitio que se te ocurra. La ventaja de ir a Acapulco es el calor del puerto, lo que hará que pases una Navidad diferente pero mucho más divertida.
Baja California Sur.
Los Cabos es uno de los lugares más visitados en estas fechas ya que siempre hay eventos navideños en los restaurantes grandes y pequeños. El clima es agradable, además de que el 15 de diciembre comienza el avistamiento de ballenas. De igual forma, muchos visitantes extranjeros, principalmente provenientes de Estados Unidos y Canadá, llegan al lugar a pasar sus navidades y el Año Nuevo. En este sitio tendrás un ambiente familiar.
Guanajuato.
En este lugar se llevan a cabo diversas celebraciones para honrar la Navidad, es, de hecho, uno de los lugares que mantienen viva la tradición. Montan un árbol inmenso en el centro y se pueden ver algunas pastorelas; en las calles las personas salen a dar ponche casero y las recorren con música proveniente de estudiantinas y músicos callejeros que entonan villancicos.
Ciudad de México.
La plancha del Zócalo, así como las plazas comerciales, se iluminan con árboles de Navidad, luces y adornos navideños que muestran árboles, esferas y muchos otros motivos de temporada, por ejemplo, se instalan pistas de patinaje y en las calles lanzan nieve artificial. Puedes hacer tu cena en algún restaurante y recorrer otras delegaciones en las que hay, por lo general, eventos como pastorelas, posadas y rompen piñatas.
Puebla.
Uno de los destinos navideños por excelencia se ubica en Puebla. Hablamos de Chignahuapan, cuna de las esferas en México. En este lugar hay muchas clases de adornos, tanto para el árbol como para el hogar y la capital poblana ofrece un verdadero espíritu de hogar en su centro. Además de los típicos adornos hechos con luces, también hay espectáculos artísticos que incluyen música y pastorelas.
Chihuahua.
Los hospedajes que se encuentran en medio del bosque, específicamente cerca de la Sierra Tarahumara suelen proporcionar paquetes para la cena navideña que incluyen alimentos y algunas atracciones como shows u obras de teatro. En esta época del año Chihuahua se llena de nieve, lo que te hará sentirte en un invierno de película. Hay algunos lugares que permiten hacer hombres de nieve y jugar con ella.
Estado de México.
En este lugar encontramos el Nevado de Toluca, mismo que debes visitar al menos una vez en la vida, en especial en fechas decembrinas. Puedes subir hasta la cúspide si eres una persona extrema. No puedes acampar, pero a las faldas del volcán suele haber hospedajes, aunque no por muchos días. Sin embargo, puedes visitar otros lugares cercanos como Amecameca, donde además de hospedarte podrás cortar tu propio árbol de Navidad.
Playa del Carmen.
Se ubica dentro de la Riviera Maya, por lo que su población vive las fiestas decembrinas de manera conjunta con las tradiciones de fin de año de los mayas. Si tienes ganas de vivir una Navidad convencional, lo mejor es ir a los hoteles aledaños que ofrecen cenas para diferentes presupuestos. En algunos dan incluso regalos y claro, la oferta gastronómica es única. Esta misma se da en los restaurantes de la 5ta Avenida, donde se encuentran los mejores de la ciudad.
Lo más importante de la Navidad es celebrar junto a los seres queridos, ya sea la familia, amigos o la pareja, incluso uno mismo, pero el punto central de las fiestas es tener un momento agradable y una cena deliciosa. No importa si crees o no en la tradición de la que proviene la Navidad, basta con tener una noche diferente y divertida.