Ahora más que nunca hay que cuidarse y recurrir a la tierra mexicana para nutrirse y estar fuerte.
Somos lo que comemos. Y cada vez está más claro que no hay dieta mejor que la que ofrece nuestra propia tierra. Lo que aquí se cultiva está fresco y es producido por locales, así que consumirlo es más sustentable y justo para la economía de nuestras comunidades. Pero eso no es todo: comer local es más accesible y es una buena forma de honrar nuestra cultura gastronómica.
Te presentamos 7 alimentos mexicanos para cuidar tu sistema inmunológico.
1. Chile: Los chiles tienen muchísimas propiedades medicinales. Todo es gracias a la capsaicina. Esta sustancia es antioxidante, antiinflamatoria y antimicrobiana. Para curarse o prevenir enfermedades provocadas por bacterias o infecciones por hongos, comer chile en todas sus presentaciones puede ser muy útil. Además, la capsaicina estimula el sistema inmunológico.
2. Amaranto: El amaranto es uno de los alimentos más nutritivos del planeta. Y es 100% de origen mexicano. Vale la pena comerlo para no enfermarse de distintas cosas, porque cualquier falla en el cuerpo nos hace vulnerables a distintos virus. El amaranto es rico en minerales, contiene calcio, magnesio, hierro, cinc y selenio. Por esto estimula el sistema inmunitario. Además, sus hojas contienen vitaminas A, B1, B2, B3 y C y antioxidantes.
3. Chocolate: El chocolate es un gran antioxidante (y también un antidepresivo); contiene polifenoles, flavonoides y catequinas, entre otros. Además, el cacao tiene un alto contenido de fibra, minerales y vitaminas A, E y B. Según Ramón Estruch, especialista, «El cacao natural es uno de los alimentos más ricos en polifenoles y se ha visto como su consumo regular disminuye la prevalencia de enfermedades crónicas» y aumenta la funcionalidad del sistema inmunológico.
4. Maíz azul: El maíz azul contiene altas dosis de antocianinas, un antioxidante que, por cierto, le da el color azul. Además, contiene vitamina A y las vitaminas del complejo B. Estas propiedades lo hacen un gran alimento para prevenir el cáncer; pero también un alimento para reforzar las defensas del cuerpo.
5. Jitomate: Aunque muchos no lo saben, el jitomate es un alimento que México le regaló al mundo. Y lo que menos conocen sus propiedades medicinales. El jitomate es «antiséptico, alcalinizante, depurativo, diurético, digestivo, laxante, desinflamatorio y remineralizante». Además es rico en calcio, fósforo, potasio y sodio y vitaminas A, B1, B2, y C. Lo más recomendable es comerlo crudo.
6. Quelites: Los quelites están llenos de fibra; tienen altas dosis de vitaminas A y C y minerales como calcio, potasio y hierro; importantísimas para el funcionamiento del sistema inmunológico y para el mantenimiento del sistema cardiovascular.
7. Miel melipona: La miel melipona es tradicional entre los mayas. Y estas comunidades aún la valoran por sus propiedades medicinales. En algunas regiones se utiliza para curar picaduras de bichos, porque sirve para cicatrizar; además se consume porque apoya en el tratamiento del aparato respiratorio (como la garganta inflamada) y porque ayuda en la producción de glóbulos rojos y está llena de vitaminas y minerales.
Fuente: Masdemx.com