Texcoco fue la capital del Estado de México por 4 meses, aún así, allí se promulgó la primera Constitución del Estado de México.
La capital natural del Estado de México era la Ciudad de México, puesto que también lo había sido de la Intendencia Colonial. Por ello, el General Múzquiz estableció sus oficinas en el edificio que había sido de la Inquisición y después fue la Escuela de Medicina.
Por su parte el Congreso Constituyente del Estado se reunía en una casa de la calle del Indio Triste, que después fue Correo Mayor. Pero dentro del Congreso Constituyente Nacional, algunos diputados comenzaron a cuestionar que una ciudad como la de México, que había sido levantada con el esfuerzo de todas las partes de la Nación, fuera la capital de un sólo estado. Alegaban que ya de por sí nuestra entidad tenía mucho territorio por lo que, agregándole la Ciudad de México, resultaba un estado demasiado poderoso.
Por fin, el 18 de noviembre de 1824 el Congreso Nacional decretó que la Ciudad de México fuera la sede de los poderes federales y ordenó al General Múzquiz que eligiera para capital del Estado de México cualquier otra ciudad.
Ante tal acto, nuestro estado tuvo que darse a la búsqueda de otra capital. Se eligió Texcoco, pero para esa fecha esta población no contaba con lo necesario para convertirse en capital permanente del estado. Así que el experimento duró sólo cuatro meses. Con todo, allí se promulgó la primera Constitución del Estado de México el 14 de febrero de 1827. Conforme a ella, el territorio del estado se comprendía en los distritos de Acapulco, Cuernavaca, Huejutla, México, Taxco, Toluca, Tula y Tulancingo.
Se trata de la primera de las cuatro constituciones que ha tenido el Estado de México, la cual estableció las bases de independencia y soberanía de nuestra entidad.