Val’Quirico fue construido como un complejo residencial inspirado en la antigua arquitectura italiana.
Entrar a este pueblo te hará sentir que estás en un rincón italiano de la época medieval, sólo que no encontrarás dragones, caballeros o aves rapaces volando por ahí. Se llama Val’quirico, está en el estado de Tlaxcala, y ahí podrás caminar por sus callejones y túneles de piedra.
Este pueblo a hora y media de la Ciudad de México, te sorprenderá con su colorido rústico y sus buenas opciones para comer. Es un lugar perfecto para visitar en un viaje ida y vuelta. Visualmente, combina la apariencia de una campiña italiana con la magia de los pueblos en México. Puedes llegar desde temprano y disfrutar de estos espacios al aire libre, con empastados verdes y clima soleado en verano.
Está formado por casas hechas con materiales como piedra y madera, lo que le da una apariencia medieval. Además de deleitarte visualmente, en Val’Quirico tiene un área de restaurantes para disfrutar de la hora de la comida. Encontrarás opciones como carne a la parrilla, cortes, hamburguesas, mariscos, platillos gourmet y una ostería italiana con pastas y pizzas.
Para continuar, renta una bicicleta, disponible solo sábados y domingos, y recorre el pueblo con la tranquilidad que puedes encontrar en dos ruedas. A lo largo de este paseo también encontrarás heladerías, cafeterías, tiendas de artesanías y un área especial con juegos para niños.
La construcción de Val’Quirico fue hecha sobre los vestigios de una hacienda porfiriana dedicada a la agricultura y el ganado. Después de su apogeo en la segunda mitad del siglo XIX, la hacienda fue convertida en un club privado, el cual no tuvo éxito, tiempo más tarde la hacienda fue modificada hasta convertirse en un pueblo artificial semejante a la Toscana de Italia. La idea de Val’Quirico surgió cuando los accionistas del recinto estaban de paso por la campiña italiana.
