CR Comunicación

DÍA DE MUERTOS

Falta poco para la celebración más característica de los mexicanos, donde honramos a los que se ya se han ido y sonreímos a nuestro inevitable deceso. 

El Día de Muertos es una celebración mexicana de origen mesoamericano que honra a los difuntos el 2 de noviembre, comienza desde el 1 de noviembre, y coincide con las celebraciones católicas de Día de los Fieles Difuntos y Todos los Santos. Es una festividad que se celebra en México y en algunos países de América Central, así como en muchas comunidades de los Estados Unidos, donde existe una gran población mexicana y centroamericana. La Unesco ha declarado la festividad como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

muertos2

El culto a la muerte en México no es algo nuevo, pues ya se practicaba desde la época precolombina. Asimismo, en el calendario mexica, que se localiza en el Museo de Antropología, se puede observar que entre los 18 meses que forman este calendario, había por lo menos seis festejos dedicados a los muertos. Posteriormente, los evangelizadores cristianos de tiempos coloniales aceptaron en parte las tradiciones de los antiguos pueblos mesoamericanos, fusionándolas con las tradiciones europeas, para poder implantar el cristianismo entre dichos pueblos.

LA CELEBRACIÓN EN EL MUNDO MESOAMERICANO.

Para los antiguos mesoamericanos, la muerte no tenía las connotaciones morales de la religión católica, en la que las ideas de infierno y paraíso sirven para castigar o premiar. Por el contrario, ellos creían que los rumbos destinados a las almas de los muertos estaban determinados por el tipo de muerte que habían tenido, y no por su comportamiento en la vida. De esta forma, las direcciones que podrían tomar los muertos son:

– El Tlalocan o paraíso de Tláloc, dios de la lluvia: A este sitio se dirigían aquellos que morían en circunstancias relacionadas con el agua: los ahogados, los que morían por efecto de un rayo, etc., el Tlalocan era un lugar de reposo y de abundancia. Aunque los muertos generalmente se incineraban, los predestinados a Tláloc se enterraban, como las semillas, para germinar.

muertos3

– El Omeyocán, paraíso del sol, presidido por Huitzilopochtli, el dios de la guerra: A este lugar llegaban sólo los muertos en combate, los cautivos que se sacrificaban y las mujeres que morían en el parto. Dentro de la escala mesoamericana de valores, habitar el Omeyocan era un privilegio, ya que era un lugar de gozo permanente, en el que se festejaba al sol y se le acompañaba con música, cantos y bailes.

muertos4

– El Mictlán: Destinado a quienes morían de muerte natural. Este lugar era habitado por Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl, señor y señora de la muerte. Era un sitio muy oscuro, sin ventanas, del que ya no era posible salir. El camino para llegar al Mictlán era muy tortuoso y difícil, pues para llegar a él las almas debían transitar por distintos lugares durante cuatro años.

muertos5

ALTAR DE MUERTOS:

Los materiales comúnmente utilizados para hacer una ofrenda para el Día de Muertos tiene un significado, y son, entre otros, los siguientes:

– Calaveras: Las calaveras de dulce tienen escrito en la frente el nombre del difunto (o en algunos casos de personas vivas, en forma de broma modesta que no ofende en particular al aludido), y las consumen parientes o amigos.

– Pan de muerto: Es una representación de la eucaristía, y fue agregado por los evangelizadores españoles. Es un panecillo dulce que se hornea en diferentes figuras, desde simples formas redondas hasta cráneos, adornado con formas de huesos hechas con el mismo pan; se le espolvorea azúcar y se elabora con anís.

muertos1

– Cempasúchitl: Es símbolo del resplandor del sol, que se consideraba el origen de todo. Cada flor representa una vida, y en el caso del difunto significa que este aún conserva un lugar dentro del Todo, y que no ha sido olvidado por sus amigos y familiares.

– Retrato de la persona recordada: El retrato del difunto sugiere el ánima que los visitará la noche del 2 de noviembre. Dicha imagen honra la parte más alta del altar. Se coloca de espaldas y frente a ella se coloca un espejo para que el difunto solo pueda ver el reflejo de sus deudos y estos vean a su vez únicamente al difunto.

– Pintura o cromo de las Ánimas del Purgatorio: La imagen de las ánimas del purgatorio sirve para pedir la salida del purgatorio del alma del difunto por si acaso se encontrara ahí.

– Doce cirios: Aunque pueden ser menos, tienen que ser en pares, y preferiblemente de color morado, con coronas y flores de cera. Los cirios, sobre todo si son morados, son señal de duelo. Los cuatro cirios en cruz representan los cuatro puntos cardinales, de manera que el ánima pueda orientarse hasta encontrar su camino y su casa aparte de agua y sal.

– Cruz: Utilizada en la mayoría de los altares, es un símbolo introducido por los evangelizadores españoles, con el fin de incorporar el catecismo a una tradición tan arraigada entre los indígenas, como la veneración de los muertos.

– Calabaza en tacha: En el altar se prepara como dulce, llamado calabaza en tacha porque el recipiente usado en la fabricación del azúcar se le llama “tacho”. En la actualidad se prepara cocida en miel de piloncillo o panela, antiguamente llamada también tacha para bendecir las casas.

– Papel picado: Es una artesanía mexicana que se elabora con papel de china recortado con figuras de esqueletos y calaveritas, este es considerado como una representación de la alegría festiva del Día de Muertos y del viento.

Papel picado en dia de muertos

– Vara de tejocote: Con esa se abrirá paso el alma que regresa a visitar a sus parientes, por eso no se le deben de quitar las espinas.

– Arco de caña y flores: En algunos lugares de México se acostumbra a realizar este arco, el cual simboliza el paso a una vida de purificación y el abandono del cuerpo terrenal.

– Copal e incienso: El copal es un elemento prehispánico que limpia y purifica las energías de un lugar, santificando el ambiente.

– Agua: El agua tiene gran importancia ya que, entre otros significados, refleja la pureza del alma, el cielo continuo de regeneración de la vida y de las siembras y en la ofrenda se representa con un vaso lleno de agua que sirve para que el espíritu mitigue su sed después del viaje desde el mundo de los muertos.

– Comida: Se coloca el alimento tradicional o el que era del agrado de los fallecidos se coloca para que el alma lo disfrute.

– Bebidas alcohólicas: Son bebidas que fueron del gusto del difunto denominados “trago”, generalmente son “caballitos” de tequila, pulque, cerveza y mezcal.

muertos6