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REABREN LA CAPILLA RIVERIANA EN CHAPINGO

A un año siete meses de permanecer cerrada al público, la Capilla Riveriana, fue reabierta por el rector de la Universidad Autónoma Chapingo.

La capilla que alberga parte de la obra del muralista Diego Rivera, fue reabierta por el rector de la Universidad Autónoma Chapingo, doctor Sergio Barrales Domínguez, quien reconoció y agradeció la labor que realizaron especialistas del Taller de Obra Mural del Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (Cencropam) del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).

Con el sismo del 19 de septiembre de 2017, la obra de Diego Rivera registró aparición de grietas, así como desprendimientos en murales, por lo cual, la subdirección del Museo Nacional de Agricultura se dio a la tarea de realizar los trámites correspondientes para que se llevaran a cabo los trabajos de restauración.

Por diversos motivos, queda pendiente la solicitud, para que a la Capilla Riveriana se le otorgue el reconocimiento de Patrimonio Cultural de la Humanidad, se espera que la próxima administración universitaria logre ese objetivo que da mayor valor, no sólo a la obra en su conjunto, sino a toda la universidad.

Los frescos de Diego Rivera en la capilla de Chapingo, son considerados por muchos como su obra maestra. Son el producto de un movimiento muralista que en la década de los veinte nació con la Revolución Mexicana.

La capilla representa en un primer plano de ideas, la evolución de la naturaleza (biológica), plasmada en el muro oriente. En un segundo plano, Diego representó la transformación de la sociedad, por efecto de la lucha revolucionaria (desarrollo histórico – social), en el muro occidental, relacionando ambos planos, ambas temáticas, entre sí. Esta obra mural alcanza una superficie de 700 metros cuadrados, con un lenguaje sencillo y penetrante, pleno de armonía y calidad estética; expresa la larga tradición de lucha del campesinado mexicano, es una visión estética del materialismo como concepción del mundo y de la historia; en ella se concibe al hombre como transformador de la naturaleza y, simultáneamente, vincula el desarrollo natural con el progreso social.

Fuente: Web.chapingo.mx